Dia 5 - ¿Quien sabe más el nuevo capitán o el viejo marinero?

A lo largo de nuestra vida, vamos acompañados de una mochila que contendrá todo el conocimiento que vamos adquiriendo. Hasta hace unos años eran las instituciones educativas las que tenían la facultad de transmitir el conocimiento, al menos en los aspectos más técnicos o académicos. Esto ya no es así.
Podemos encontrar gente con unos conocimientos extraordinarios en diferentes aspectos de la vida que no tiene una formación (al menos tal y como se entiende formación de la forma tradicional) demostrable.
Las instituciones educativos debemos de contribuir a que nuestr@s alumn@s reciban la mejor formación posible y parte de esa formación es sin duda la competencia para aprender a aprender. La posibilidad de crear personas capaces de autoformarse utilizando los miles de recursos de los que disponemos actualmente no debe ser desaprovechada. Y nuestra misión como docentes debe cada vez más ser la de un guía que les enseñe el camino a seguir para adquirir los conocimientos.
Además enseñar determinados aspectos académicos, que sin duda alguna son importantes y sirven como base para asentar otros conceptos, debemos también enseñar a discernir entre información relevante y no relevante, lo que actualmente se conoce como curación de contenidos ya que será esa competencia la que les permitirá realizar una formación más completa a lo largo de la vida.
De la misma forma, nosotros como docentes, debemos aprender a conseguir las competencias necesarias para adaptarnos el medio actual, un medio lleno de información relevante y también no relevante, y buscar en el aprendizaje formal las bases y guias necesarias para poder descubrir mediante los aprendizajes informales y no formales los conocimientos que nos harán falta.